Nitrógeno es el nutriente crucial e más influyente en la producción de las praderas. Las necesidades de potasio, fósforo, azufre, calcio y magnesio se relacionan a la cantidad de nitrógeno aplicado. Existe una gran demanda de estos macronutrientes durante el crecimiento temprano en primavera y para evitar cualquier factor limitante en producción es importante que el suministro de nutrientes en cantidades suficientes esté presente para que la planta los pueda absorber. La absorción de nutrientes y producción de las praderas dependen de la intensidad de producción y si se lo aprovecha con corte o animales pastoreando.
Una estrategia de nutrición es esencial y aunque las cantidades necesarias de micronutrientes son mucho menores, el equilibrio correcto tiene que estar disponible como son elementos esenciales para obtener buena producción. Los micronutrientes más importantes en praderas son cobre, manganeso y zinc.
Otros micronutrientes que no sean esenciales para praderas pero necesarios para los animales pastoreando incluyen sodio y selenio, y también el cobre y el zinc se requieren en cantidades más grandes en los animales que lo requerido para el desarrollo del pasto mismo.
Nitrogeno es el nutriente principal en el cultivo de praderas. Es clave para lograr un alto contenido de materia seca y con frecuencia se usa en manera estratégica para incrementar la producción. El factor principal para obtener rendimiento alto es aplicar la cantidad idónea de nitrógeno de la fuente adecuada en el momento oportuno.
El fósforo juega un papel importante en muchos procesos metabólicos y enzimáticos en la planta y aunque las demanda de fósforo es baja en comparación con nitrógeno, la disponibilidad es importante. El fósforo acelera y mejora el desarrollo del pasto y es importante para incrementar la producción. La importancia del suministro del fósforo va en incremento con la edad de las plantas en la pradera. El fósforo es muy inmóvil en el suelo y su disponibilidad se limita con el pH, la distancia a las raíces y la temperatura del suelo.
El potasio es el nutriente que en más cantidad se absorbe por el pasto. El potasio tiene varias funciones en la planta y afecta absorción de nutrientes, fotosíntesis, velocidad de desarrollo y valor nutritivo para el ganado.
El azufre es esencial en la formación de proteínas y es así crucial para crecimiento y desarrollo. Conforme vaya creciendo el pasto, tanto el azufre como el nitrógeno se consumen juntos en la manera en que una deficiencia de azufre reducirá la eficacia del uso de nitrógeno reduciendo así el rendimiento. Históricamente, la demanda de azufre se cubría con depósitos atmosféricos pero como resultado de emisiones industriales reducidas y mejor calidad del aire, estos depósitos se han reducido considerablemente durante las últimas décadas en la manera que vemos un aumento en la respuesta a las aplicaciones de azufre en praderas y otros cultivos. .
Magnesio también debe de considerarse.
Zinc y manganeso han mostrado tener efecto en la producción en praderas.